Por Juana Rosado-Pérez, Osvaldo D. Castelán-Martínez, Abril J. Mújica-Calderón, Martha A. Sánchez-Rodríguez, y Víctor Manuel Mendoza-Núñez

Antecedentes: Este estudio tuvo como objetivo sintetizar la evidencia del efecto de la práctica de Tai Chi en los marcadores de estrés oxidativo (OxSM).

El estrés oxidativo (OxS) es una alteración bioquímica en la que el desequilibrio entre la producción de especies reactivas (RS) y antioxidantes, a favor de las primeras, promueve el daño oxidativo de biomoléculas y alteraciones en la fisiología celular, y, aunque la RS juega un papel muy importante papel fisiológico, OxS se ha relacionado con el desarrollo de muchas enfermedades y sus complicaciones, así como con el proceso de envejecimiento.

Se ha demostrado que el envejecimiento se aumenta el OxS así como su asociación con diversas patologías, como enfermedades neurodegenerativas y cerebrovasculares, enfermedades renales crónicas, diabetes mellitus 2, hipertensión arterial, aterosclerosis y cáncer. Por ello, se han propuesto diferentes alternativas terapéuticas para controlar el OxS asociado a la fisiopatología de algunas enfermedades, entre las que destacan el consumo de melatonina, una dieta rica en antioxidantes y ejercicio físico moderado.

En este sentido, el Tai Chi es una forma de ejercicio tradicional chino basado en modificaciones de las artes marciales que se caracteriza por una serie de movimientos suaves y continuos, cuya ejecución requiere control de la posición, respiración profunda y coordinación de los movimientos de piernas, brazos. , torso y cabeza para pasar de una posición a otra, moviendo el punto de equilibrio sin detenerse. Todo esto se realiza bajo un estado de relajación y concentración indispensable para lograr el equilibrio en el movimiento. Se clasifica como actividad física moderada, dado el gasto máximo de oxígeno y frecuencia cardiaca que implica.

Dada su naturaleza, tiene una gran aceptación en el ámbito gerontológico, y en este sentido, numerosos estudios reportan los beneficios del Tai Chi en aspectos como el equilibrio, la estabilidad y la elasticidad, elementos esenciales para mantener la marcha y disminuir las caídas. También se han reportado mejoras en los sistemas cardiovascular, respiratorio, inmunológico, endocrino y respuestas psicológicas, ya que la práctica de Tai Chi requiere una profunda concentración además de la memorización de los movimientos, sus nombres y su secuencia.

Varios ensayos clínicos han reportado que la práctica de Tai Chi tiene un efecto antioxidante, lo que se atribuye a una posible respuesta hormética debido al estímulo sostenido, que implica un grado de esfuerzo físico, respiración y meditación trascendental, característico de esta actividad; sin embargo, esta evidencia no ha sido analizada sistemáticamente. Por lo tanto, este estudio tuvo como objetivo sintetizar la evidencia del efecto de la práctica de Tai Chi en los marcadores OxS (OxSM).

Métodos: esta revisión sistemática y metanálisis se realizó utilizando las bases de datos MEDLINE, Cochrane Library, ScienceDirect, Scopus, Epistemonikos, Lilacs y Ovid para identificar ensayos clínicos aleatorios (RCT) y no aleatorios (NRCT) que evaluaron el efecto del Tai Chi. en OxSM en comparación con el comportamiento sedentario, caminar o yoga. Las diferencias de medias agrupadas (MD) con intervalos de confianza del 95 % (IC del 95 %) se calcularon mediante el método de la varianza inversa para determinar el efecto del Tai Chi en OxSM. Registro PRÓSPERO: CRD42019138362.

Resultados: Se incluyeron cinco ECA y cinco NRCT. En comparación con el comportamiento sedentario, la práctica regular de Tai Chi aumenta los niveles de las enzimas superóxido dismutasa (DM = 34,97 U/mL, (IC del 95 %, 9,45 a 60,48), 344 participantes) y catalasa (DM = 15,63 U/mL, (95 %IC, 4,05 a 27,22), 110 participantes), así como reducir los niveles de lipoperóxidos (DM = −0,02 µmol/L, (95%IC, −0,04 a −0,00), 234 participantes). Para las comparaciones con caminar o yoga, solo se identificó un estudio por actividad que comparaba el efecto sobre OxSM.

Conclusiones: La práctica regular de Tai Chi aumenta los niveles de las enzimas antioxidantes superóxido dismutasa y catalasa, además de reducir los niveles de lipoperóxidos en comparación con el comportamiento sedentario. Se necesitan más estudios para determinar el efecto del Tai Chi en los marcadores de estrés oxidativo en comparación con otras actividades físicas como caminar o yoga.

#taichi #qigong #artesmarciales #antioxidantes #estrés

Desde hace muchos años se ha dicho que todo practicante de tai chi es más longevo y goza de buena salud, pero sólo una practica constante te ayudará a obtener los beneficios, adicionalmente de una buena alimentación. No dejes pasar el tiempo y practica, visita nuestra página y encontrarás horarios y sedes:

Fuente: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC8037964/